Boca Unidos mereció un poco más en el sur

El arquero de la CAI fue fundamental para asegurar la igualdad de su equipo ante Boca Unidos. El árbitro, Ariel González, de floja actuación, expulsó a cuatro jugadores -dos por cada lado- aunque el local estuvo en inferioridad numérica casi 50 minutos.


Gentileza Diario Crónica (Chubut).La CAI y Boca Unidos igualaron ayer sin goles, en uno de los encuentros que se jugaron por la 13º fecha del la primera B Nacional. En el primer tiempo ya se veía que iba a ser un partido totalmente trabado, sin vestigios de juego atildado.
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La primera etapa tuvo tres lapsos bien diferenciados: uno favorable a los correntinos en los primeros diez minutos, aunque sin llegadas; media hora muy favorable al “azzurro”, con tres llegadas y los instantes posteriores a la expulsión de Ponce, donde cambió el partido. La Comisión de Actividades Infantiles se fue al descanso sin abrir el marcador, con muchas situaciones de gol entre las que se contabilizaron una definición débil de Bubas al cuerpo de Díaz, otra de Soto Torres -el mejor en ese período- por arriba y otra que el 11 definió muy al medio a siete metros del arquero, quien contuvo su remate. Pero la más clara la tuvo el 9, cuando por derecha exigió a Leo Díaz por el primer palo, quien mandó el balón al córner con su mano izquierda y sobre el final vio pasar por arriba del travesaño un nuevo envío de Bubas, que llegó resbalando a la pelota. Quedaba ver qué pasaba en el segundo tiempo pensando que al local, si bien iba a tener el viento a su favor, el hecho de jugar con un hombre menos en más de la mitad del partido, lo iba a condicionar. Ese condicionamiento pareció caer más en la dupla técnica y su actualidad que pasa por la cuerda floja, que por los jugadores en el campo, puesto que el cambio de Rivadeneira por Villafáñez pretendió afirmar el medio y con eso prácticamente se renunció a atacar en los segundos 45’. El cuadro de Kudelka, que en el primer tiempo había esbozado algo, al inicio presionando en las bandas y después bajó el ritmo, volvió a imprimir vértigo con un jugador más en el campo, teniendo su opción más clara con un remate combado de Amaya que dio en la base del poste derecho de Capogrosso. Luego de las expulsiones de Meloño y Benítez, Bastianini casi aprovecha uno de los pocos errores del 1 local, pero Garré despejó sobre la línea un rebote que quiso empujar el centrodelantero del equipo de la Mesopotamia y, tras cartón, el arquero le tapó un mano a mano a Medina, que la había bajado con el pecho y volvió a ahogar el grito correntino en una doble tapada, primero ante el 9 y luego jugándose la ropa ante la arremetida de Mota. El primer envío serio al arco de Díaz en el complemento llegó recién a los 41’, con un remate lejano de Manchot, poco para pretender llevarse los tres puntos, lo mismo que las ganas de Romero, el rato que le tocó estar, abandonado a una soledad casi absoluta. Así, la CAI terminó rescatando un punto que a esta altura no es poca cosa pensando en las últimas derrotas jugando en casa, especialmente por los resultados que le estaban siendo adversos en los minutos finales de cada partido, pero esta vez la defensa y -especialmente- Capogrosso, bajaron la persiana para asegurar el empate.